Rompiendo el Molde

Hay una gran cantidad de historias mágicas rozando lo enfermizo de aquel colectivo de ensueño de los años 60s y 70s del siglo pasado denominado groupies. Las groupies no tan solo eran fans incondicionales, sino que iban más allá, y en su atrevimiento lograban regocijarse en los brazos ( y sábanas) de famosos rockeros, algunos ya leyendas y otros que, siendo parte de un popular grupo, también agarraban su parte. Era que no.

Ahora, si bien hay historias de cama de éstas seguidoras incondicionales que suelen ser un calco una de otras (con figuras de la talla de Mick Jagger, Steven Tyler, Jimmy Page o David Bowie), hay otras historias que trascienden épocas y resultan, por lo menos, peculiares, únicas y memorables. Una de las leyendas groupies : Cynthia Plaster Caster.

En la segunda mitad de la década de los 60, Plaster estudiando arte en Illinois le pidieron hacer un molde de algo sólido como parte de un trabajo. Aficionada a la escultura y a la música, tuvo una particular idea sobre el trabajillo: hacer moldes de yeso de penes en erección. Pero no de cualquiera. Sino de la gente que admiraba.

Todo buen molde, requiere buen método.

Para llevar a cabo tan fálica propuesta Plaster Caster tenía que hacer coincidir tres elementos claves (además de las herramientas artísticas) que eran : La artista (el cerebro tras esto ), El modelo (quien vería inmortalizada su masculinidad) y La estimuladora (mano de obra).

Mientras una chica debía poner a punto al varón de turno, Cynthia Plaster, en otra habitación, mezclaba los ingredientes para el fin. Cuando ya el modelo estaba en “óptimas condiciones”, se procedía a unir el molde con el falo erecto, y , cerca de un minuto después, se podía obtener una buena reproducción de aquello. Pero la idea de Plaster Caster no queda solo ahí, después de probar con un par de amigos ella buscó una colección. Y de gente talentosa.

“Yo quiero a Hendrix”

Después de los buenos resultados de las pruebas con cercanos, Plaster se enteró de la llegada a Chicago de The Jimi Hendrix Experience. Y su mente comenzó a preparar el golpe maestro. O el molde maestro.

Como buena groupie, logró acercarse al más grande guitarrista de todos los tiempos, Jimi Hendrix, y hacerle saber su propuesta. Con detalles. Y con la esperanza de que, al menos, fuese tomada en cuenta. Corría el año 1968.

Para su sorpresa, Hendrix seguramente exclamó un “Yeah Baby!”, anotándose para tal iniciativa. Convirtiéndose en el primer rockstar en posar para ella. Y, según la historia, el resultado fue prominente. If you know what i mean.

Posteridad.

Luego del mítico molde de Hendrix, Plaster continuó su odisea de conseguir modelos, ya mas interesada en su genital proyecto que en el rock and roll. Y los moldes incluyen a gente como la banda MC5, Ricky Fataar (baterista de los Beach Boys) y Jello Briafa (voz de los Dead Kennedys). El último molde masculino que hizo fue en el 2006.

Aún viva, con variadas historias, comercializa productos vía web y con un cartel de leyenda groupie (tuvo amoríos con integrantes de Jimi Hendrix Experience y Paul Revere & The Raiders y Kiss le dedicó la canción “Plaster Caster”), se ganó un especial espacio dentro de la extraña historia del rock.

Por Zorrendo